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Perfectamente preparado, el hígado frito es delicioso y tiene mucho valor nutricional. Es una gran idea para una cena rápida. Sin embargo, vale la pena recordar algunas reglas para mantenerlo suave y delicado.
¿Qué vale la pena saber y cómo hacer un jugoso hígado de pollo?
- Al principio, vierta el hígado en rodajas con leche durante min. hora.
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El hígado de pollo frito va bien con cebollas y manzanas. Córtalos en cubos pequeños.
- Elija utensilios de cocina con revestimiento antiadherente, como las sartenes Zwilling.
- Luego calentar una gran cantidad de grasa y saltear las coberturas.
- Recuerde sazonar el hígado con sal solo después de freírlo, y no lo pinche con un tenedor. Esto lo mantendrá suave.
- Mezcle el hígado escurrido con leche en la sartén.
- Opcionalmente, puede sazonar el hígado con pimienta y mejorana mientras lo fríe.
- Sirva el hígado de pollo frito con pan o puré de patatas.
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